Para poder empezar este artículo nos tenemos que remontar a los Playoffs de 2010, a la segunda ronda de la Conferencia Este que enfrentaban a los Boston Celtics y a los Cleveland Cavaliers. Los de Ohio ostentaban la primera plaza de su conferencia y de la Liga, con un récord de 61-21 y venían de arrollar por un 4-1 a los Bulls de un Derrick Rose que aún disputaba su temporada sophomore.
Los Cavaliers partían una vez más, por aquel entonces, como favoritos al anillo, y era un equipo al que solo los Lakers como actuales campeones, le podían hacer sombra. Ya en 2009 fracasaron, quedándose a las puertas de las Finales, y querían enmendar sus errores. Ese equipo de Cleveland contaba con jugadores como LeBron James, Anderson Varejao, Mo Williams, Antawn Jamison, Shaquille O'Neal, Delonte West y Anthony Parker. Lo dicho, un equipo contender con ganas de revancha.
Nada más lejos de la realidad, los Celtics los eliminan con un marcador de 4-2 y entra el miedo en los aficionados de Cleveland. Se acerca un verano que jamás van a olvidar. LeBron, harto de fracasos decide abandonar el equipo y partir hacia Florida. Como resultado de su partida, James deja un equipo deshecho y perdido. Al año siguiente los Cavaliers establecen un récord de 19-63, nada que decir; el alma del equipo los había abandonado y no se habían recuperado.
Al final de esa temporada, despiden al entrenador Mike Brown y firman a Byron Scott, con esperanzas de poder volver a formar un equipo competitivo en no muy largo plazo. Además, la suerte vuelve a sonreír a los Cavaliers, y consiguen el primer y el cuarto pick para el Draft del 2011. Escogen con la primera elección al base Kyrie Irving, un one-&-done de la prestigiosa Duke, y, aunque solo disputara 11 partidos en su periplo universitario, era ya el más deseado. Junto a Irving llega Tristan Thompson, ala-pívot proveniente de Texas Longhorns, y otro one-&-done. Los fans de la franquicia de Ohio ponen en estos dos jugadores todas sus esperanzas para volver a lo alto, sobretodo en Irving.
El joven base no defrauda, consiguiendo de calle el ROY, a quien solo Ricky Rubio le pudo disputar un poco el trofeo. Pero a nivel colectivo, las cosas seguían mal en Cleveland, balance de 21-45. Algo normal, dado que el teórico segunda espada de Irving, Anderson Varejao solo juega 25 partidos, lastrado por las lesiones; y el resto del equipo no está a la altura.
No importa, nuevas ilusiones para el Draft de 2012. Seleccionan al escolta junior de Syracuse, Dion Waiters, y al ala-pívot senior Tyler Zeller, de North Carolina. Como sucediera el año anterior, solo uno destaca, Dion Waiters que se convierte rápidamente en un buen aliado para Irving. Pero otra vez, las lesiones dejan de lado a Varejao, que vuelve a disputar solo otros 25 partidos. Otra temporada pésima 24-58 de balance, donde Irving es la única razón que tienen los seguidores de Cleveland para sonreír.
El 18 de Abril, Scott es destituído como head coach. Tras tres años al frente del equipo, no ha llegado al 35% de victorias en ninguna de ellas. Su puesto ya no está vacante. Poco ha durado el banquillo de Cleveland en volver a ser ocupado, por nada más y nada menos que por Mike Brown, que vuelve a la franquicia donde consiguió el título de entrenador del año, y vuelve a los Cavaliers el entrenador con el que llegaran a aquellas finales ante los Spurs, pero esta vez, no está James. Otro año más los fans de Cleveland no pueden aferrarse a otra cosa que no sea el Draft, y rezar para que lo que salga de ahí sea bueno. Otro año más, parten con ilusiones, y otro año más puede que solo se queden en eso, ilusiones; pero también es posible que este año estemos ante el comienzo de la resurrección de los Cavaliers, o no, quién sabe, el tiempo lo dirá.
Los Cavaliers partían una vez más, por aquel entonces, como favoritos al anillo, y era un equipo al que solo los Lakers como actuales campeones, le podían hacer sombra. Ya en 2009 fracasaron, quedándose a las puertas de las Finales, y querían enmendar sus errores. Ese equipo de Cleveland contaba con jugadores como LeBron James, Anderson Varejao, Mo Williams, Antawn Jamison, Shaquille O'Neal, Delonte West y Anthony Parker. Lo dicho, un equipo contender con ganas de revancha.
LeBron James en su última temporada en Cleveland |
Nada más lejos de la realidad, los Celtics los eliminan con un marcador de 4-2 y entra el miedo en los aficionados de Cleveland. Se acerca un verano que jamás van a olvidar. LeBron, harto de fracasos decide abandonar el equipo y partir hacia Florida. Como resultado de su partida, James deja un equipo deshecho y perdido. Al año siguiente los Cavaliers establecen un récord de 19-63, nada que decir; el alma del equipo los había abandonado y no se habían recuperado.
Al final de esa temporada, despiden al entrenador Mike Brown y firman a Byron Scott, con esperanzas de poder volver a formar un equipo competitivo en no muy largo plazo. Además, la suerte vuelve a sonreír a los Cavaliers, y consiguen el primer y el cuarto pick para el Draft del 2011. Escogen con la primera elección al base Kyrie Irving, un one-&-done de la prestigiosa Duke, y, aunque solo disputara 11 partidos en su periplo universitario, era ya el más deseado. Junto a Irving llega Tristan Thompson, ala-pívot proveniente de Texas Longhorns, y otro one-&-done. Los fans de la franquicia de Ohio ponen en estos dos jugadores todas sus esperanzas para volver a lo alto, sobretodo en Irving.
Kyrie Irving |
El joven base no defrauda, consiguiendo de calle el ROY, a quien solo Ricky Rubio le pudo disputar un poco el trofeo. Pero a nivel colectivo, las cosas seguían mal en Cleveland, balance de 21-45. Algo normal, dado que el teórico segunda espada de Irving, Anderson Varejao solo juega 25 partidos, lastrado por las lesiones; y el resto del equipo no está a la altura.
No importa, nuevas ilusiones para el Draft de 2012. Seleccionan al escolta junior de Syracuse, Dion Waiters, y al ala-pívot senior Tyler Zeller, de North Carolina. Como sucediera el año anterior, solo uno destaca, Dion Waiters que se convierte rápidamente en un buen aliado para Irving. Pero otra vez, las lesiones dejan de lado a Varejao, que vuelve a disputar solo otros 25 partidos. Otra temporada pésima 24-58 de balance, donde Irving es la única razón que tienen los seguidores de Cleveland para sonreír.
El equipo de Cleveland de esta temporada |
El 18 de Abril, Scott es destituído como head coach. Tras tres años al frente del equipo, no ha llegado al 35% de victorias en ninguna de ellas. Su puesto ya no está vacante. Poco ha durado el banquillo de Cleveland en volver a ser ocupado, por nada más y nada menos que por Mike Brown, que vuelve a la franquicia donde consiguió el título de entrenador del año, y vuelve a los Cavaliers el entrenador con el que llegaran a aquellas finales ante los Spurs, pero esta vez, no está James. Otro año más los fans de Cleveland no pueden aferrarse a otra cosa que no sea el Draft, y rezar para que lo que salga de ahí sea bueno. Otro año más, parten con ilusiones, y otro año más puede que solo se queden en eso, ilusiones; pero también es posible que este año estemos ante el comienzo de la resurrección de los Cavaliers, o no, quién sabe, el tiempo lo dirá.