domingo, 28 de abril de 2013

Posted by Fontenla |
Para poder empezar este artículo nos tenemos que remontar a los Playoffs de 2010, a la segunda ronda de la Conferencia Este que enfrentaban a los Boston Celtics y a los Cleveland Cavaliers. Los de Ohio ostentaban la primera plaza de su conferencia y de la Liga, con un récord de 61-21 y venían de arrollar por un 4-1 a los Bulls de un Derrick Rose que aún disputaba su temporada sophomore.

Los Cavaliers partían una vez más, por aquel entonces, como favoritos al anillo, y era un equipo al que solo los Lakers como actuales campeones, le podían hacer sombra. Ya en 2009 fracasaron, quedándose a las puertas de las Finales, y querían enmendar sus errores. Ese equipo de Cleveland contaba con jugadores como LeBron James, Anderson Varejao, Mo Williams, Antawn Jamison, Shaquille O'Neal, Delonte West y Anthony Parker. Lo dicho, un equipo contender con ganas de revancha.

LeBron James en su última temporada en Cleveland

Nada más lejos de la realidad, los Celtics los eliminan con un marcador de 4-2 y entra el miedo en los aficionados de Cleveland. Se acerca un verano que jamás van a olvidar. LeBron, harto de fracasos decide abandonar el equipo y partir hacia Florida. Como resultado de su partida, James deja un equipo deshecho y perdido. Al año siguiente los Cavaliers establecen un récord de 19-63, nada que decir; el alma del equipo los había abandonado y no se habían recuperado.

Al final de esa temporada, despiden al entrenador Mike Brown y firman a Byron Scott, con esperanzas de poder volver a formar un equipo competitivo en no muy largo plazo. Además, la suerte vuelve a sonreír a los Cavaliers, y consiguen el primer y el cuarto pick para el Draft del 2011. Escogen con la primera elección al base Kyrie Irving, un one-&-done de la prestigiosa Duke, y, aunque solo disputara 11 partidos en su periplo universitario, era ya el más deseado. Junto a Irving llega Tristan Thompson, ala-pívot proveniente de Texas Longhorns, y otro one-&-done. Los fans de la franquicia de Ohio ponen en estos dos jugadores todas sus esperanzas para volver a lo alto, sobretodo en Irving.
Kyrie Irving


El joven base no defrauda, consiguiendo de calle el ROY, a quien solo Ricky Rubio le pudo disputar un poco el trofeo. Pero a nivel colectivo, las cosas seguían mal en Cleveland, balance de 21-45. Algo normal, dado que el teórico segunda espada de Irving, Anderson Varejao solo juega 25 partidos, lastrado por las lesiones; y el resto del equipo no está a la altura.

No importa, nuevas ilusiones para el Draft de 2012. Seleccionan al escolta junior de Syracuse, Dion Waiters, y al ala-pívot senior Tyler Zeller, de North Carolina. Como sucediera el año anterior, solo uno destaca, Dion Waiters que se convierte rápidamente en un buen aliado para Irving. Pero otra vez, las lesiones dejan de lado a Varejao, que vuelve a disputar solo otros 25 partidos. Otra temporada pésima 24-58 de balance, donde Irving es la única razón que tienen los seguidores de Cleveland para sonreír.
El equipo de Cleveland de esta temporada

El 18 de Abril, Scott es destituído como head coach. Tras tres años al frente del equipo, no ha llegado al 35% de victorias en ninguna de ellas. Su puesto ya no está vacante. Poco ha durado el banquillo de Cleveland en volver a ser ocupado, por nada más y nada menos que por Mike Brown, que vuelve a la franquicia donde consiguió el título de entrenador del año, y vuelve a los Cavaliers el entrenador con el que llegaran a aquellas finales ante los Spurs, pero esta vez, no está James. Otro año más los fans de Cleveland no pueden aferrarse a otra cosa que no sea el Draft, y rezar para que lo que salga de ahí sea bueno. Otro año más, parten con ilusiones, y otro año más puede que solo se queden en eso, ilusiones; pero también es posible que este año estemos ante el comienzo de la resurrección de los Cavaliers, o no, quién sabe, el tiempo lo dirá.

sábado, 13 de abril de 2013

Posted by Fontenla |
Han pasado 6 años desde la última vez que los Golden State Warriors entraron en los Playoffs, y este año, después de más de un lustro de decepciones y desilusiones, han vuelto, y por la puerta grande.

Mucho ha llovido ya desde esa última vez donde los Warriors entraron en la post-seasson, pero está en el recuerdo de todos. Después de una decente temporada que acabó con balance positivo (42-40) quedaron clasificados en la última plaza con acceso a Playoffs, y por lo tanto se enfrentarían a los Dallas Mavericks, que con un balance de 67-15 ostentaban el mejor récord del Oeste y de la Liga. En una de las series más memorables de la pasada década, Golden State eliminaba a los texanos con un global de 4-2, para luego caer en semifinales de conferencia ante los Utah Jazz.

En la temporada siguiente a la gesta, a pesar de hacer una buena temporada y acabar con un balance de 48-34, la competitividad de la Conferencia Oeste los deja fuera de los Playoffs, y esa es la última temporada en la que consiguen acabar con un balance positivo, hasta la actual.

Es en 2009-10 donde se comienza a ver un atisbo de esperanza para los de Oakland. En el draft de 2009 seleccionan a Stephen Curry con la 7ª posición.
Éste es el hombre clave, Stephen Curry, un base delgado y con cara de niño, que a primera vista no parece que esté hecho para jugar al baloncesto. Es alrededor del jugador de Akron donde se empiezan a construir nuevas ilusiones, completando dos muy buenos primeros años en Golden State. Curry compartía posición con Monta Ellis, con el que llegó a tener sus mases y sus menos, pero esta relación solo duró una temporada y media, siendo Ellis traspasado por Andrew Bogut a Milwaukee con la finalidad de añadir un compañero interior a David Lee.

Stephen Curry

Acaba la temporada 2011-12 con un balance de  23-43 muy decepcionante, marcado por la lesión de Stephen Curry, que solo llegó a disputar 26 partidos. Pero pronto llega el Draft, algo que a mi parecer es clave en el porvenir de los Warriors este año. Sabiendo de la fragilidad de Bogut, seleccionan a dos jugadores interiores de trabajo, Festus Ezeli y Draymond Green que están cumpliendo con las expectativas, pero también eligen con el pick 7 a una pieza que les faltaba, el alero Harrison Barnes.

Comienza la temporada 2012-13 con más ilusiones de lo habitual, y esta vez los Warriors no decepcionan. Curry, que promedia 22.8pts y 6.9asist por partido se convierte, aún más si cabe, en el líder del equipo escudado por Klay Thompson y David Lee. Entrenados por Mark Jackson, quien en su primer año produjera serias dudas que ya se han despejado, poco a poco los Warriors van ganando partidos y asentándose en posiciones cómodas de cara a los Playoffs. Consiguen diferentes victorias difíciles y de prestigio, como por ejemplo contra los Heat, con una bandeja ganadora de Draymond Green. Golden State no estaba de broma y bajo el lema "We Believe" cada vez son tomados más en serio, hasta que finalmente, se clasifican matemáticamente para Playoffs. Ahora mismo se encuentran sextos, con un récord de 45-35, y solo les quedan dos partidos, frente a San Antonio y Portland, pero el objetivo ya está cumplido, van a la post-temporada, donde tengo muy seguro que harán un gran papel.

Mark Jackson y Klay Thompson

Pero el éxito de los Warriors no sería posible sin él, sin Curry. Su salud es un factor importante en este año. Se ha demostrado que con él sano, Golden State es un equipo totalmente distinto. Los Warriors bailan al ritmo que marca Stephen, el cual se carga el equipo a la espalda y tira de todos sus compañeros con sus triples y su magia en la cancha. Sus exhibiciones anotadoras, entre las que destacan 54 puntos en el Madison Square Garden con 11 triples anotados; o incluso los 47 puntos registrados ayer ante los Lakers nos dejan claro que Curry es ya una estrella de la NBA, y que con él los Warriors puede que den otra sorpresa, como aquella vez en 2007.

domingo, 24 de marzo de 2013

Posted by Fontenla |
Mitad hombre mitad animal, o como lo llaman en Estados Unidos, The Manimal. Con ese sobrenombre es conocido Kenneth Faried, ala-pívot de los Denver Nuggets, cuya historia es bastante peculiar.

Faried es un chico especial, pero no solo desde ahora. Su madre biológica, Waudda, a los 10 años de tener a Kenneth, se enamoró y casó con otra mujer Manasin Copeland, pasando así a tener 2 madres, hecho por el cual, en la actualidad, es uno de los grandes defensores de los derechos de los homosexuales, lo que le ha llevado a ganar un galardón por parte de la NBA.

Pero la parte no humana de su mote, la parte animal, Kenneth se la debe a una persona que no llegó a conocer, su padre, del cual ha heredado unas capacidades físicas y atléticas que solo están al alcance de muy pocos en la NBA y en cualquier deporte. Estas capacidades, unidas a un esfuerzo constante, y una garra y pelea dentro de la pista, son las que le han llevado a que promediara 12 rebotes durante su ciclo universitario en Morehead State, donde cumplió los cuatro años. Es en el College donde ya se le comienza a ver como un muy buen reboteador, a pesar de su "escasa" altura para su posición, ya que midiendo 2.03m, una altura normal para un alero, juega de ala-pívot. A parte de los rebotes, Faried en el College destaca por su más que decente anotación por partido: 10.5 como freshmen, 13.9 como sophomore, 16.9 como junior y 17.3 como senior son sus credenciales.

Kenneth Faried en Morehead State


Durante su tercer año en Morehead State, Faried se declaró elegible para la el Draft de la NBA de 2010, pero más tarde reculó, y volvió para cumplir su ultimo año como universitario, llevando a los Morehead State Eagles al campeonato de la Ohio Valley Conference, y ganándose un seed 13 en el Campeonato de la NCAA, donde consiguieron una impensable victoria ante unos Louisville Cardinals que tenían un seed 4. Finalmente los Eagles quedaron eliminados por Richmond, pero Faried había conseguido un record de importancia mayúscula en la Division I de la NCAA, había batido a Tim Duncan como máximo reboteador, dejando el nuevo record en 1,673. Fue también en su año senior cuando es elegido para el segundo mejor quinteto All-American, y disputa el Reese's-All Star Game, siendo elegido MVP. Faried ya había despertado, y llamaba a las puertas de la mejor liga del mundo.

En el Draft de 2011, los Denver Nuggets lo eligen con el puesto nº22. En su primer año, Faried juega 46 partidos, 39 como titular, promediando 22.5 minutos por encuentro, y 7.7 rebotes y 10.2 puntos.

Kenneth Faried


Ahora, en su segundo año, Faried ha disputado los 71 partidos que ha jugado Denver, saliendo de titular en todos ellos, promediando 28.6 minutos, 9.5 rebotes y 11.8 puntos, números que lo llevaron a disputar el RisingStars Challenge durante el All-Star de 2013 en Houston, ganando el MVP del partido.

Faried es uno de los grandes artífices de la excepcional temporada que están haciendo los Nuggets, siendo 3º en el Oeste y matemáticamente clasificados para Play-Offs, un equipo muy joven donde no hay una estrella que brille demasiado por encima de ningún otro jugador.
 
Lo que si brilla en Denver, ciudad situada a 1.609 metros de altura sobre el nivel del mar, es la sonrisa de Kenneth Faried, esa sonrisa que mantiene cada minuto de juega, esa sonrisa que nos hace ver que disfruta jugando y que aún brilla más después de uno de sus espectaculares mates, pero lo que más podemos sacar de esa sonrisa, es que es la sonrisa de un chaval humilde llamado a hacer grandes cosas en esta liga.

martes, 19 de marzo de 2013

Posted by Fontenla |
Cuando hablamos de San Antonio Spurs lo hacemos de una franquicia ganadora, pero cuyos éxitos han llegado relativamente hace no mucho tiempo, en los últimos 13 años, en los cuales han ganado 4 campeonatos. 

Casi todos los éxitos de San Antonio giran alrededor de sus tres pilares principales en la cancha, Tim Duncan, Manu Ginobili y Tony Parker. Es con estos tres jugadores con los que San Antonio se destapa como franquicia ganadora, llamada a éxitos, y con los dos últimos con los que ganan 3 de los 4 anillos que poseen, siendo Duncan el escudero de David Robinson en el primero de estos, aquel campeonato de 1999 marcado por el primer cierre patronal o lockout de la NBA.


Tim Duncan celebrando un título con el trofeo de MVP de las Finales en la mano.

Pero tanto mérito tienen esos 3 jugadores como el entrenador, Gregg Popovich. Popovich llega en 1996, después de una desastrosa campaña donde los Spurs solo habían conseguido un pobre balance de 20-62, y la franquicia despide a Bob Hill, dándole el cargo al entrenador de origen serbio-croata. Su efecto en el equipo es inmediato, 56-26 en la temporada siguiente, y para la próxima, el primer anillo. "Pops" comienza a consagrarse como uno de los mejores entrenadores de la NBA, premio que más tarde se le concederá en 2 ocasiones, 2003 y 2012.

Su estilo de juego, muy similar al de los equipos europeos, es la base del éxito de Popovich en San Antonio, que es interpretado en la pista por unos jugadores que han de tener un gran Basketball IQ para poder llevarlo a cabo. Con esto, Popovich ha llevado a los Spurs a que, desde que se hiciera con los mandos del equipo en 1996, cosecharan todas las temporadas hasta la actualidad con un balance bastante superior siempre al 60% de victorias (siendo la más "pobre" en 2009/2010 con un 61%), de las cuales 9 han sido de un 70% o superiores.


Gregg Popovich

Son unos datos de escándalo para un entrenador que se ha considerado muy seguidor del baloncesto europeo, del cual recientemente ha dicho que se debería aprender más, y que los fundamentos de los jugadores europeos superan a los de los americanos.

Aún manteniendo sus tres baluartes, y rodeándolos de jugadores jóvenes que son conscientes de su rol, tanto los titulares como los secundarios, muchos no sitúan a los Spurs como candidatos este año al anillo. Sus razones las tienen, ya que estos últimos años acaban siendo "decepcionantes" en la post-temporada, perdiendo en primera ronda en 2009 y 2011 (Series épicas donde los Grizzlies, 8º en el Oeste, ganan su primer partido en Playoffs, fuera de casa para mas inri, y acaban eliminando a los Spurs, que fueran 1º). Pero este año, veo a Duncan levantando otra vez el título. Y cada partido que pasa estoy más convencido. Mucha culpa de ello la tiene Kawhi Leonard, ese alero que todos quisieramos tener en nuestro equipo. Un jugador atlético, buen defensor, con una mano fiable desde la linea de 3 (tan del estilo de Popovich). Veo en el callado y poco mediático jugador de los tejanos una de las claves que pueden decantar la balanza hacia el lado Spur en los Playoffs.


Kawhi Leonard

Unido a Leonard, se ha destapado el pivot brasileño Tiago Splitter. Despues de una mala campaña como rookie y una decente temporada sophomore, ahora Splitter aumentó notablemente su número de minutos en la cancha, lo que se ha traducido en un aumento también de sus números, promediando esta temporada 24.3 mins, 10.5pts y 6.1 rebotes.
Y también se unió el año pasado Stephen Jackson, aportando veteranía y más seguridad desde el triple.

Desde mi punto de vista, veo a los Spurs claros candidatos al anillo, lo cual sería un gran triunfo para Duncan, Parker y Ginobili (los cuales parece que no sienten el paso del tiempo) ya que conseguirian el quinto campeonato de la franquicia en 14 años. Pero también corren el peligro de dar otra decepción, cayendo eliminados en Semifinales de Conferencia, o incluso antes (quién sabe), lo que deja un sabor de boca muy amargo, después de ser el mejor de tu conferencia.

Una cosa tengo clara, Duncan y compañía andan siempre al acecho, y quieren un anillo más.